Cnl. Iván Omonte Sejas PhD.
RECTOR EMI.
Las universidades de Bolivia, públicas, privadas, indígenas y de régimen especial, que se encuentran distribuidas en los nueve departamentos, en sus niveles de grado y posgrado, deben actuar en el marco de la PROACTIVIDAD y la RESILIENCIA.
Es decir, los directivos, docentes, estudiantes, personal administrativo y de apoyo, deben mostrar una actitud positiva, activa y de mucha iniciativa ante esta crisis global y compleja.
Es realmente complejo el problema que hoy aqueja al mundo, ya que se desconoce el origen y las causas de la pandemia, existen hipótesis y conjeturas diversas sobre ello, mucho menos se conoce su patrón de comportamiento y los efectos que ocasionará en el corto, mediano y largo plazo sobre la salud, economía, política, ciencia, tecnología, cultura y la educación.
Los que somos parte de una universidad, debemos ser capaces de hacer frente a esta adversidad y debemos tener la valentía y la capacidad de reinventarnos y seguir adelante. Por ello las universidades deben poner a disposición de la lucha contra el coronavirus sus recursos humanos capacitados, sus capacidades de investigación y sobre todo sus conocimientos.
El rol de nuestras universidades ante este flagelo, deben estar circunscritas en lo Académico, Investigación y la Interacción Social nacional e internacional.
En lo ACADÉMICO deben tener la capacidad de migrar el proceso de enseñanza aprendizaje presencial al proceso de enseñanza aprendizaje digital o en línea y si es posible en un futuro mediato, uno o dos años, lograr una educación que utilice tecnologías inmersivas como la realidad virtual y la realidad aumentada. Estas dos tecnologías pueden ser utilizadas para reproducir de manera simulada escenarios prácticos y experimentales.
La migración del mundo educativo analógico al mundo cibernético virtual es algo inevitable, la maldita pandemia solo lo está agilizando.
Es momento de ir cerrando la asimetría o brecha digital que existe entre países desarrollados y los que no lo son, no de ampliarlo aún más, las universidades deben extremar esfuerzos en la utilización de las plataformas de educación en línea, existe tecnología de pago y libre para ello.
También es cierto y es necesario reconocer que en el país no existe una cobertura total del servicio de internet, pero esta situación negativa debe ser solucionada por las operadoras telefónicas que brindan el servicio con carácter de urgencia, son las operadoras telefónicas los que deben invertir en la ampliación de cobertura y mejora de ancho de banda y ofertarlos a precios razonables. Son las universidades, como un conjunto, los que deben exigir la pronta solución de dicha ineficiencia, deben también exigir una reducción de precios. Así mismo exigir que la Agencia Boliviana Espacial (ABE) a través del famoso satélite Tupac Katari pueda llegar con internet a los lugares donde no se puede llegar con fibra óptica, si el mismo era para eso y para hacer telemedicina.
Nuestros docentes, muchos de ellos de la generación X o Y, deben mejorar sus estrategias pedagógicas y didácticas para impartir clases en ambientes digitales, ello exige compromiso y una mayor autocapacitación en el manejo de las herramientas cibertecnológicas existentes.
Considero que los estudiantes deben mostrar mayor proactividad en pasar las clases en línea, en vista de que ellos son nativos digitales, son millenials, son la generación Z, ellos están en su medio, los jóvenes se encuentran en su hábitat.
Los estudiantes están al día en el manejo de diversas herramientas cibertecnólogicas como las redes sociales, Facebook, Twitter, YouTube y Whatsapp. Es decir, ellos ya son habitantes del ciberespacio o espacio cibernético, espacio al cual se encuentran conectados casi permanentemente a través de sus celulares o móviles inteligentes.
En lo que se refiere a la INVESTIGACIÓN, las universidades deben presentar a la sociedad y sobre todo a las empresas e industrias, diseños, modelos, prototipos y productos para ser fabricados en grandes cantidades, es importante señalar que muchas universidades en nuestro país no tienen capacidades de fabricación e industrialización masiva, por ello la necesidad urgente de que las empresas dirijan sus miradas y trabajen de la mano con las universidades.
Nosotros como Escuela Militar de Ingeniería, propusimos varios diseños de productos, cuando estaba escaseando el alcohol en gel, se presentó a la sociedad, la dosificación y los pasos a seguir para la fabricación casera pero efectiva de dicho producto y otras alternativas, ello freno de alguna forma, el agio y la especulación.
Se propuso el diseño para la fabricación de un termómetro laser, el diseño de barbijos impresos en 3D, el diseño de fumígenos desinfectantes, el diseño de túneles de desinfección y en este momento se trabaja en dos modelos de respiradores con componentes que deben ser alcanzables en el mercado local o factibles de fabricar.
Debo enfatizar, en que son las industrias, las empresas los que deben reinventarse y jugar un rol protagónico conjuntamente con las universidades, ¿dónde están los laboratorios farmacéuticos?, ¿dónde están los laboratorios de análisis? que se encuentran instalados en Bolivia, ¿qué innovación proponen al país?
¿Dónde está la capacidad de nuestras empresas para producir unos simples barbijos?, aquí hago el llamado a las empresas que fabrican plásticos, ellos pueden fabricar barbijos en grandes cantidades, nosotros como EMI como universidad tenemos el modelado, solo falta la matriz el molde en acero y luego solo es inyectar el plástico, nos acercamos a unas cuantas fábricas, nos dijeron que les aseguremos mercado, da pena decirlo, pero se lo debe decir.
Con respecto a los barbijos, los artesanos son ingeniosos, ya están vendiendo barbijos hechos de tela y te dicen son lavables, reutilizables. ¿Dónde está la universidad, para decirles mejoren su diseño?, coloquen a esa simple tela, filtros, una gasa de algodón, el algodón es un filtro, luego coloquen otro filtro, una capa de 5 mm de poliuretano más conocido como esponja y ya tenemos un barbijo funcional, luego sometan a prueba este diseño, échenle café y vean que pasa.
En lo que respecta a INTERACCIÓN SOCIAL, las universidades deben conformar una red de voluntariado para diversas tareas, desde tareas simples de desinfección hasta tareas de atención médica y de enfermería para los enfermos con coronavirus.
Me explico, las universidades que cuentan con carreras de Medicina, Enfermería, Bioquímica, Biología y Psicología deben ir preparando a los estudiantes desde el nivel de tercer año para apoyar en los hospitales donde se encuentran los pacientes con covid-19, ello amerita una preparación rápida, señores debemos planificar y estar preparados para el peor escenario, es mejor prevenir que lamentar.
Las universidades deben apoyar en crear consciencia en la gente a través de mensajes y spots bien elaborados, que fundamentalmente busquen educar en desinfección, higiene personal y de alimentos, es decir trabajar en las medidas preventivas.
Se puede ir generando más ideas para las diferentes carreras, ¿qué puede hacer la carrera de ingeniería industrial?, ¿qué pueden hacer los que están estudiando arquitectura?, ¿qué pueden hacer los que están estudiando para abogados?
Creo sinceramente que todos podemos ser útiles y no ser obstáculos, sigamos adelante ya que SOLO EL CONOCIMIENTO, LA EDUCACIÓN Y LA FE EN DIOS NOS LLEVARAN A VER LA LUZ DEL MAÑANA.